The European Union as a singular international legal subject in arctic governance

Since the 1990s, the Arctic has been inevitably and progressively linked to climate change, causing great environmental concern and high expectations of economic exploitation. Until very recently, the special vulnerability of the Arctic has been protected from human exploitation because of its diffi...

Full description

Bibliographic Details
Published in:Revista Europea de Derecho Comunitario
Main Author: Sobrido Prieto, Marta
Format: Article in Journal/Newspaper
Language:Spanish
Published: Centro de Estudios Políticos y Constitucionales 2017
Subjects:
Online Access:https://recyt.fecyt.es/index.php/RDCE/article/view/59382
https://doi.org/10.18042/cepc/rdce.57.03
Description
Summary:Since the 1990s, the Arctic has been inevitably and progressively linked to climate change, causing great environmental concern and high expectations of economic exploitation. Until very recently, the special vulnerability of the Arctic has been protected from human exploitation because of its difficult access and habitability. Now this vulnerability is beginning to be compromised not only by its progressive accessibility as a consequence of the Arctic ice melt, but particularly by its probable profitability. Concern about this new scenario calls for enhanced legal protection, and although the international strategy to be followed led to some debate at first, the approach about Arctic governance is now sectoral and multileveled. As a result, the EU presence in that process is unequal (different according to the forum) and asymmetrical (it does not always correspond to the competences conferred by the states to the EU). In this area, the challenges that generally face the EU in terms of admission to the international legal community, show clearly. With respect to Arctic governance, the EU is not a forum (such as the Arctic Council) but an actor (as are States, Arctic and non-Arctic). However, being an International Organization and frequently coexist with its own Members —some of them Arctic— in the same forums where Arctic issues are addressed, do not facilitate its acceptance as an Arctic actor. The progress that may take place in relation to the acceptance of the EU in the international legal community, and the strengthening of a European Arctic with its own characteristics, may be elements in its favour. Desde los años noventa el Ártico está vinculado, inevitable y progresivamente, al cambio climático, que provoca en esta región una gran preocupación medioambiental e importantes expectativas de explotación económica. La especial vulnerabilidad del Ártico, hasta ahora protegido de la explotación humana por su difícil accesibilidad y habitabilidad, se empieza a ver comprometida no solo por la progresiva accesibilidad que procura el derretimiento de los hielos árticos, sino, sobre todo, por su probable rentabilidad. La inquietud de este nuevo escenario aconseja una protección jurídica reforzada, y aunque la estrategia internacional que seguir provocó cierto debate en un primer momento, actualmente la aproximación es sectorial y multinivel. La participación de la UE en este proceso es desigual, ya que varía según el foro, y es asimétrica, porque no siempre se corresponde con las competencias que le han atribuido sus Estados miembros. Los desafíos a los que, con carácter general, se enfrenta la Unión para ser admitida en la comunidad jurídica internacional, se manifiestan claramente en este ámbito. Respecto a la gobernanza ártica, la Unión no es propiamente un foro (como es, por ejemplo, el Consejo Ártico) sino un actor (como lo son los Estados, árticos y no árticos). No obstante, el hecho de ser una organización internacional y, además, convivir frecuentemente con sus propios miembros —algunos de ellos árticos— en los mismos foros en los que se abordan temas de trascendencia para la región ártica, no facilita la aceptación de la UE como actor ártico. Los avances que con carácter general puedan producirse en relación con la aceptación de la UE en la comunidad jurídica internacional, y el fortalecimiento de un Ártico europeo con características propias, podrán ser elementos a su favor.