Transmisión de la malaria urbana en Buenaventura, Colombia: aspectos entomológicos

En los últimos años, el número de casos de malaria urbana en Buenaventura, Colombia, ha aumentado de 576 en 1987 a 3 296 en 1991 y 2 017 en 1992, por lo que se desarrolló un estudio epidemiológico para identificar patrones de transmisión de la malaria en este municipio del litoral pacífico colombian...

Full description

Bibliographic Details
Published in:Revista Panamericana de Salud Pública
Main Authors: Víctor Olano, Gabriel Carrasquilla, Fabián Méndez
Format: Article in Journal/Newspaper
Language:English
Spanish
Portuguese
Published: Pan American Health Organization 1997
Subjects:
R
Online Access:https://doi.org/10.1590/s1020-49891997000400005
https://doaj.org/article/fb41c648915d47ff803b1607f5800280
Description
Summary:En los últimos años, el número de casos de malaria urbana en Buenaventura, Colombia, ha aumentado de 576 en 1987 a 3 296 en 1991 y 2 017 en 1992, por lo que se desarrolló un estudio epidemiológico para identificar patrones de transmisión de la malaria en este municipio del litoral pacífico colombiano. Se describen los hallazgos entomológicos en relación con los vectores, los criaderos y el comportamiento de las especies de Anopheles durante el período comprendido entre junio de 1993 y mayo de 1994. De los 469 posibles criaderos del área urbana, 28 fueron positivos a anofelinos. En la zona rural vecina de Buenaventura 20 de 80 posibles criaderos fueron positivos a las formas inmaduras del mosquito. Los sitios donde se encontró con más frecuencia Anopheles albimanus fueron las excavaciones de minería, los lagos y los estanques para piscicultura. Los criaderos de Anopheles nuñeztovari fueron los pozos de lluvia y estanques de peces. Anopheles neivai se recolectó en bromelias. De las capturas intra y peridomiciliarias de mosquitos adultos, 90% correspondieron a Anopheles albimanus. De las hembras, 54,8% habían realizado al menos una ovipostura. Esta especie tuvo una actividad peridomiciliaria máxima entre las 18.00 y 22.00 horas. La mayor tasa de picadura peridomiciliaria fue de 7,1 y correspondió a marzo de 1994. Se espera que esta información entomológica permita poner en marcha un importante proceso de participación comunitaria e implementar medidas de control que estén orientadas por nuestros resultados.