Paso elevado, en Krahnenberg

En las proximidades de Andernach (Alemania) se está construyendo una derivación de la carretera general, con unos 1.100 m de longitud total, que consiste en una especie de puente o paso elevado. Se justifica esta solución particular por la poca consistencia del terreno y el especial trazado a media...

Full description

Bibliographic Details
Published in:Informes de la Construcción
Main Author: Hans Wittfoht
Format: Article in Journal/Newspaper
Language:English
Spanish
Published: Consejo Superior de Investigaciones Científicas 1965
Subjects:
Aun
Online Access:https://doi.org/10.3989/ic.1965.v17.i167.4440
https://doaj.org/article/63b7291f786d4663b085c53a01c2ce6d
Description
Summary:En las proximidades de Andernach (Alemania) se está construyendo una derivación de la carretera general, con unos 1.100 m de longitud total, que consiste en una especie de puente o paso elevado. Se justifica esta solución particular por la poca consistencia del terreno y el especial trazado a media ladera. El eje del paso elevado sigue una alineación curva con radio mínimo de 475 m, y está subdividido en 34 tramos de 31,75 m de luz. El conjunto que forma el tablero es una viga cajón, bicelular, de hormigón pretensado y grandes salas en voladizo que dan una anchura total de 18,20 m, lo cual permite la habilitación de dos bandas de circulación separadas por un macizo central y dos andenes laterales para peatones. Aun tratándose de una obra importante, por su volumen, destacan notablemente los procedimientos empleados en su construcción. Dada la falta de sustentación del terreno y, por ello, la necesidad de evitar las cargas concentradas, se pensó que un sistema Gerber, provisional, sustituiría ventajosamente a los medios tradicionales de cimbras. El empleado aquí consiste en cuatro vigas en celosía, metálicas, que se apoyan sobre cabezales colocados en los soportes, previamente construidos. Dichas vigas—convenientemente articuladas para, seguir fácilmente el trazado curvo— se van trasladando por corrimiento, con la ayuda de gatos hidráulicos, de tramo en tramo y a medida que el hormigonado va avanzando. Una grúa de 35 m de radio de acción se encargó de las maniobras locales de aproximación y colocación de materiales y encofrados en obra.