Incidencia de enterocolitis necrosante en niños prematuros alimentados precozmente

Introducción. La enterocolitis necrosante es una catástrofe multifactorial de los recién nacidos, generada por vasoconstricción visceral. Se discute el papel que juega el momento, tipo y velocidad de los incrementos de la vía oral en la patogenia de la entidad. Objetivo. Comparar la incidencia de en...

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Published in:Biomédica
Main Authors: Luis Alfonso Pérez, Germán Lauro Pradilla, Gaby Díaz, Sandra María Bayter
Format: Article in Journal/Newspaper
Language:English
Spanish
Published: Instituto Nacional de Salud 2011
Subjects:
R
Online Access:https://doi.org/10.7705/biomedica.v31i4.397
https://doaj.org/article/27ae5f6197c347448ff1ec300fa20569
Description
Summary:Introducción. La enterocolitis necrosante es una catástrofe multifactorial de los recién nacidos, generada por vasoconstricción visceral. Se discute el papel que juega el momento, tipo y velocidad de los incrementos de la vía oral en la patogenia de la entidad. Objetivo. Comparar la incidencia de enterocolitis necrosante y la mortalidad entre prematuros en quienes se inició alimentación entérica a las 48 horas de vida extrauterina, frente a otros en quienes se empezó al quinto día de vida. Materiales y métodos. Se llevó a cabo un ensayo clínico controlado de 239 neonatos de 750 a 1.500 gramos de peso y de 27 a 32 semanas de edad de gestación, asignados al azar, 135 a alimentación temprana y 104 a alimentación tardía con leche materna o fórmula láctea para prematuros. Se inició con un mililitro cada seis horas, para progresar en intervalos de tres horas y un incremento diario de hasta 20 ml/kg hasta llegar a 150 ml/kg al día, siempre y cuando no se observaran signos o síntomas de intolerancia a la vía oral. Resultados. Se presentaron 14 casos de enterocolitis necrosante en el grupo de alimentación temprana (10,4 %) y nueve (8,7 %) en el de alimentación tardía (RR=1,22; IC95 % 0,49-3,20; p=0,652). Cinco (3,7 %) niños fallecieron en el grupo de alimentación temprana (IC95 % 1,4-8,9) y ocho (7,7 %), en el de alimentación tardía (IC95 % 3,6-15,0), sin que estas diferencias fueran significativas (RR=0,46; IC95 % 0,12-1,60; p=0,182). Conclusión. El iniciar en forma temprana la alimentación entérica en neonatos prematuros no aumenta el riesgo de enterocolitis necrosante ni el de mortalidad y sí representa grandes ventajas para estos pacientes.